La gestión de proyectos en el terreno industrial se realiza, al igual que en cualquier ámbito, mediante una serie de fases que nos permiten analizar, planificar, coordinar, ejecutar y controlar todo lo referente a recursos, acciones, necesidades, costes… imprescindible a la hora de alcanzar nuestros objetivos de empresa o nuestro producto deseado.

A la hora de plantearnos una necesidad industrial, debemos ser conscientes de toda la información que necesitamos aportar y tener en cuenta, todo el presupuesto que se va a destinar para ello y cuáles son los objetivos concretos a conseguir.

Estos objetivos finales, aunque se planteen en un primer momento como potencialmente difíciles o utópicos, siempre, absolutamente siempre, tienen que ser alcanzables, de lo contrario todo este proceso puede quedar en saco roto.

 

Gestión de proyectos industriales. Fases.

Antes de nada, tienes que asesorarte y recurrir a profesionales del sector que te brinden las mejores soluciones técnicas para tu caso concreto.

Pero, ¿cuáles son estas fases a tener en cuenta en nuestro proyecto industrial?

Análisis de situación

Hay que determinar de manera clara y precisas cuáles son las necesidades que la empresa o futura empresa tiene. Además, determinar cuáles son sus objetivos concretos.
Por ello se realiza un estudio previo para que quede reflejado de manera detallada todo el universo que hay que tener en cuenta y que rodea e interviene en cada gestión de proyectos concreto.
Analizamos presupuesto y objetivos.

 

Estudio y determinación de soluciones

Al ser una necesidad empresarial, las soluciones técnicas que el profesional aporte, dependerán de multitud de factores que se habrán especificado en el paso anterior.
Así que una vez esto se analiza se determina cuál o cuáles van a ser las soluciones más efectivas para cada proyecto en concreto.
Analizamos materias primas, tecnologías a utilizar, estimaciones de tiempo…

 

Diseño

Una vez se ha determinado la solución técnica a realizar se procede al diseño e ingeniería del producto. El diseño industrial es el protagonista en esta fase ya que nos permitirá al detalle disponer de las características del producto virtual.

Puedes ampliar más información al respecto en nuestro post de Diseño Industrial.

 

Prototipo

Antes de proceder a cualquier cadena o proceso de producción se realiza una fase de moldeado, donde conseguimos un prototipo del producto real diseñado en la fase anterior.
Ello nos permite, por un bajo coste, ver y apreciar cómo será el producto, sus características, definir mejoras o establecer deficiencias.

 

Fabricación

Una vez el prototipo se ha aceptado, se pone en marcha todo el engranaje de la operativa industrial. Contacto con proveedores y especificaciones de fabricación.

Y finalmente, la implementación en la cadena que se requiera de montaje.

 

Gestión post producción

Muy importante es gestionar las certificaciones y/o normativas necesarias para cumplir con los reglamentos solicitados.

 

En Pimol gestionamos tu proyecto industrial. Nuestra experiencia en el sector nos avala para ofrecer las mejores soluciones a las necesidades de tu empresa. Siguiendo todas las fases necesarias y de la manera más efectiva y rápida posible.

Además, desde el principio del proyecto, nuestros profesionales te asesoran en cada uno de los pasos a realizar y plazos de entrega, aportándote confianza, flexibilidad y seguridad en la toma de decisiones.

 

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